Toluca, Estado de México, 17 de junio de 2021.-
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), en el mundo, alrededor de 450 millones de individuos padecen algún tipo de trastorno mental.
La salud mental tiene muchas alteraciones que se conocen como enfermedades o trastornos mentales, que afectan a los procesos afectivos y cognitivos, al estado de ánimo, el pensamiento y el comportamiento.
Muchas personas sufren problemas de salud mental de tanto en tanto. Sin embargo, se convierte en enfermedad mental cuando los síntomas y signos permanecen, provocan estrés en el paciente e impiden funcionar de forma normal. En esta ocasión hablaremos de la “Locura”.
El término “loco” se puede usar para designar a una persona que presenta un comportamiento extraño y desviado de las normas sociales establecidas, debido a un trastorno de las facultades mentales que impide el funcionamiento normal de la razón y el sano juicio.
La locura está asociada con un trastorno mental, el cual se pone de manifiesto cuando el individuo comienza a percibir de manera distorsionada la realidad, además de la aparición de las alucinaciones, y comportamientos incoherentes en su conducta.
Por ejemplo, el Alzheimer, es una enfermedad que representa uno de los casos de locura más frecuente en la actualidad, esta enfermedad de carácter degenerativa poco a poco va acabando con el cerebro de las personas y que suele aparecer en personas mayores de setenta y cinco años.
Con el paso del tiempo el concepto de locura ha variado. Durante la Edad Media prevaleció la idea de que la locura era una manifestación del pecado, un castigo divino o el signo externo de estar poseído por el demonio.
Actualmente, existen el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales 5 (DSM-5) y la Guía de Consulta de los Criterios de Diagnóstico del DSM-5, que son una amplia lista de los tipos, subtipos, codificación y clasificación de los trastornos mentales y una guía para la formación de criterios diagnósticos.
Asimismo, existe un mejor conocimiento de las estructuras cerebrales que son afectadas y de los cambios que ocurren en la bioquímica cerebral, además de que los diferentes padecimientos son tratados por medio de medicamentos y terapias psicológicas.
Para el psiquiatra mexicano Guillermo Borja, “La locura es tratar de ser antes de morir. La locura es la búsqueda de la salud y requiere mucha valentía por parte del sujeto. Recordemos que uno de los terrores más grandes es perder el control”.
Desde la psicología y la psiquiatría, hay ciertos trastornos, como por ejemplo la ESQUIZOFRENIA, que en el pasado (y aun hoy en casos graves) se consideraron irreversibles y relegados a un tratamiento paliativo a merced de su deterioro.
Gracias a la moderna psiquiatría, y con los antipsicóticos de última generación que apenas producen efectos secundarios, se han conseguido grados satisfactorios de integración socio-laboral de unos pacientes que, antiguamente, eran considerados locos.
Borja opina que la salud va más allá de la funcionalidad estética, es decir, de lo que se ve bien en términos de comportamientos adecuados y formas de ser socialmente deseables. Esto implica que la “sanación” no debe ser considerada en términos de “normalización” o “adaptación”, sino de bienestar para la persona y para quienes se encuentren a su alrededor.
Con información de: acmor.org | topdoctors.es | psyciencia.com/
