Toluca, Estado de México; 19 de febrero de 2021.-

A nivel mundial, por primera ocasión desde el comienzo de la pandemia, en las últimas semanas se ha presentado un descenso drástico de los nuevos casos de Covid-19. De seguir esta tendencia, hacia finales de año podría verse un bajo volumen en el número de contagios. Sin embargo, aún con el hecho de que ya ha iniciado la aplicación de las vacunas, esta tendencia está en riesgo si no se acatan las medidas sanitarias en el periodo vacacional con motivo de Semana Santa.

El pico de los contagios en el planeta ocurrió el 11 de enero, cuando se dio a conocer la cifra de 783 mil 534 nuevos contagios confirmados. Los datos del 16 de febrero indican 52 por ciento menos en solo un mes y cinco días.

Para el caso de Estados Unidos, el país con el mayor número de contagiados y fallecidos, el pico del 11 de enero fue de 248 mil 307 nuevos contagios y para el 16 de febrero la cifra había bajado en 67.5 por ciento.

A escala mundial, el número de fallecidos por Covid-19 fue el 25 de enero cuando sumaron 14 mil 297 muertos reportados. En Estados Unidos, ese nivel se había registrado el 13 de enero con un monto de 3 mil 348. Para el 16 de febrero, los retrocesos habían sido de 26.9 por ciento a escala global y de 34.9 por ciento sólo en Estados Unidos. Son números, dentro de lo desafortunado de la pandemia, alentadores.

Entretanto, en México el pico de contagios ocurrió el 21 de enero, con un registro de 17 mil 559, mientras que el nivel más elevado de fallecidos se alcanzó el pasado 11 de febrero con mil 467. Al 16 de febrero el número de contagios fue 52.9 por ciento inferior, y el de fallecidos de 24.3 por ciento menos.

El inicio de la llegada de vacunas al país, como en otras naciones, tendrá un efecto en el número de contagios y, por supuesto, de muertos, pero éste no será drástico debido a que continúan viéndose los efectos del relajamiento de las medidas sanitarias en la temporada decembrina.

Así, aún con vacunas, la dinámica de la pandemia en México estará determinada en el corto plazo por las medidas de distanciamiento social. Esto último, especialmente con el inicio de la cuaresma, y al término de ésta, la celebración de la Semana Santa y el periodo vacacional que ello conlleva, del lunes 29 de marzo y al domingo 4 de abril.

Si no se siguen las medidas impuestas por la Secretaría de Salud y otros organismos, fácilmente México podría anticiparse a una nueva ola de contagios para abril y mayo, derivado de la Semana Mayor.

Con información de El Financiero.