VISIBILIZAR EL BULLYING, PRIMER PASO PARA FRENARLO

En América Latina, las estadísticas por acoso escolar se consideran preocupantes.

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Toluca, Estado de México, 10 de mayo de 2023.-

De acuerdo con el Ranking de la ONG Bullying Sin Fronteras, México ocupa el primer puesto en casos de acoso escolar; en los últimos años registró un crecimiento explosivo y entre 2020 y 2021, 7 de cada 10 chicos sufrían diariamente algún tipo de acoso.

En América Latina, las estadísticas por acoso escolar se consideran preocupantes, ya que la situación parece ir en aumento:

  • En Centroamérica, el 22.8% de los adolescentes afirman haber sido acosados
  • 25.6% se ha visto involucrado en peleas físicas.
  • 20.5% ha sido agredido físicamente sin razón aparente.
  • En Sudamérica, la población escolar que confiesa haber sido víctima de bullying oscila entre el 25.6% y el 31.3%.
  • En la zona del Caribe la cifra de víctimas alcanza el 38.3 %, siendo la más alta de la región.

¿Qué es el Bullying?

El acoso escolar (conocido como bullying), se define como: La violencia repetida entre pares, compañeros, compañeras, en la que uno o más individuos tienen la intención de intimidar y hostigar a otros. Se caracteriza por el abuso de poder entre niños y jóvenes en edad escolar.

El bullying es una forma de discriminación entre estudiantes hacia otro u otros por sus características o su forma de ser, orientación sexual, identidad de género, nacionalidad, situación migratoria, etnia, sexo, condición socioeconómica, condición de salud, discapacidad, creencias religiosas, opiniones, prácticas basadas en estigmas sociales, embarazo, entre otras.

Principales formas de violencia

  • Físico: golpes, empujones, patadas
  • Verbal: insultos, apodos, etc.
  • Psicológico: en el que la agresión, las amenazas y la intimidación, o la exclusión, dañan el estado emocional.
  • Cibernético: se utilizan medios como internet o mensajes por celular para intimidar u hostigar a otros.

Prevenir el Bullying

La sociedad juega un papel muy importante a la hora de prevenir el acoso, tanto en el ámbito educativo como en otros ámbitos del día a día.

Lo primero que hay que hacer, como ciudadanos para erradicar el bullying, “visibilizarlo”. “No normalizar la violencia, no permitir bromas de mal gusto ni tópicos que pueden normalizar ciertas actitudes de discriminación”, señaló Alberto Santos, director de la delegación salmantina de la Asociación Española para la Prevención del Acoso Escolar lo primero que hay que hacer, como ciudadanos para erradicar el bullying, “visibilizarlo”, explicó.

En toda Latinoamérica, las instituciones y ministerios de educación destinan cientos de recursos anualmente para lanzar campañas contra el bullying en las escuelas: en México existe el programa Misión Paz Escolar, mientras que otros países como Argentina, Colombia han implementado el método KiVa, un programa contra el bullying creado en Finlandia en 2006, y que ha dado la vuelta al mundo por su efectividad.

A partir de esta y otras metodologías, realizamos una lista de 5 estrategias efectivas para ayudarte a prevenir el bullying y hacerle frente a este problema social dentro del entorno escolar:

Estar siempre alerta

Debemos considerar que en la mayoría de los casos el bullying sucede fuera de la vista de los docentes. Incluso en mitad de una clase los acosadores tienden a ser muy discretos y generar algún tipo de agresión psicológica, la cual puede ser muy dañina por el grado de violencia socioemocional que genera.

Es por eso que toda la comunidad escolar (docentes, orientadores, administrativos y directivos) debe estar alerta ante cualquier posible amenaza de bullying y evidenciarlo en el momento en que ya no haya dudas al respecto.

No se trata solamente estar alerta esperando a que suceda un acto de acoso en cualquier momento, también implica estar al tanto de las repercusiones que deja el acoso: los cambios de humor de los estudiantes violentados, o una baja repentina en el aprovechamiento académico.

Escuchar atentamente sin desestimar la situación

Nada puede ser más desalentador para un estudiante que ser ignorado cuando intenta denunciar un problema de bullying contra él u otra persona. Si esto ocurre con frecuencia, se sentirá desamparado y la situación no hará más que empeorar.

Hay muchos factores por los que un docente puede ignorar la llamada de auxilio de un estudiante: ya sea por falta de tiempo, porque carece de las habilidades asertivas para atender la situación o simplemente por falta de interés al considerar que no es un área de su competencia.

Afortunadamente, la mayoría de los docentes latinoamericanos tienen un alto sentido de la vocación y el interés genuino para escuchar sin juzgar o subestimar la situación, por lo que es muy importante apoyarlo desde el área administrativa y de apoyo conductual.

Romper con la tendencia a normalizar el bullying

Por increíble que parezca, y a pesar de los avances que se han hecho en los últimos años para combatir el acoso escolar, aún persiste una cultura de la violencia que tiende a minimizar el bullying por considerarlo una práctica “natural” en la interacción de los estudiantes; es decir, “cosas de niños y adolescentes”.

Un estudio de García Martorell sobre las causas y prevención del bullying, señala que muchas escuelas en Latinoamérica tienden a minimizar la gravedad del acoso por las siguientes razones:

Los docentes y directivos consideran que son situaciones “inevitables” entre la población estudiantil.

Asumen que muchos conflictos entre estudiantes son una oportunidad para que aprendan a resolver sus propios problemas sin la intervención de un adulto: afirman que eso los ayuda a “hacerse más fuertes”.

El 37.6 % de los alumnos (principalmente hombres) reproducen las conductas violentas porque asumen que si no devuelven los golpes, los demás los considerarán cobardes.

Zonificar las áreas de riesgo

Es muy común que en una situación de acoso escolar, los últimos en enterarse sean los docentes, directivos y padres de familia. Esto se debe en gran medida a que los acosadores suelen buscar espacios en donde los adultos no estén presentes.

Es por eso que muchas escuelas cuentan con mapas que les permiten zonificar las áreas de riesgo, de tal manera que sea mucho más fácil identificarlas y poder actuar con mayor rapidez ante un evento de acoso.

Los lugares donde se produce el acoso escolar con mayor frecuencia son, evidentemente, los lugares de menor afluencia, como los sanitarios, laboratorios o salones de clase vacíos. Pero así también hay recurrencia en los espacios abiertos como los patios, canchas deportivas y estacionamientos.

Educar en el uso de protocolos de acción

Los docentes sabemos que no es posible defender todo el tiempo a todos los alumnos de los acosadores, ya que esta función solo es reactiva y temporal, enfocada en atender una situación, pero no la causa que lo origina.

Además, en varios casos, la defensa del alumno violentado puede ser contraproducente, pues le envía al acosador un mensaje de indefensión por parte de la víctima, provocando que se sienta incluso más confiado en sus agresiones.

De ahí radica la importancia de que los alumnos aprendan a romper con esa cultura del “pacto de silencio” y sigan ciertos pasos para defenderse contra el acoso:

Hacer de la denuncia la mejor defensa: la escuela tiene la obligación de investigar e iniciar un protocolo de acción para resolver la situación de acoso. Actuar de manera inmediata: evitar a toda costa que los eventos de acoso escolar sean tan frecuentes que terminen por normalizarse.

No responder con violencia: como parte de la presión social impuesta por los abusadores, muchos estudiantes se sienten presionados para responder a la agresión como parte de la cultura de la violencia. En ningún caso es recomendable seguir esta práctica, porque no soluciona el problema y, por el contrario, perpetúa el ciclo de agresión.

Las escuelas públicas tienen actualmente el gran reto de encontrar acciones cada vez más efectivas para entender cómo prevenir el bullying y una de ellas –quizá la más importante– consiste en hacerle saber a los alumnos que sufren de acoso escolar que no están solos, que toda la comunidad educativa está de su parte y está decidida a brindarles la ayuda que necesitan.

Con información de salud.edomex.gob.mx | blog.pearsonlatam.com