CADA 2 MINUTOS UN ADOLESCENTE ADQUIERE VIH: ONUSIDA

Los niños son los que reciben menos tratamientos y menos personas se hacen la prueba debido a la discriminación.

Foto Stringer / Reuters

Nueva York, Estados Unidos; 30 de noviembre de 2022.-

Las desigualdades, la discriminación, la estigmatización y la criminalización son factores que impiden poner fin al SIDA, dejando a mujeres, niños y adolescentes en mayor vulnerabilidad. Así lo advierte el Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/SIDA, también conocido como ONUSIDA.

De acuerdo con el organismo internacional, las desigualdades de género y económicas, así como las diferencias entre niños y adultos, están obstaculizando la respuesta frente a esta pandemia.

En áreas con alta prevalencia, las mujeres con antecedente de violencia dentro de la pareja se enfrentan a un 50 por ciento más de posibilidades de contraer el virus. Se calcula que las mujeres víctimas de este tipo de agresiones tienen una probabilidad tres veces mayor de haberlo contraído recientemente.

Por otro lado, los hombres son desalentados a buscar atención médica.

Las inequidades también se extienden entre adultos e infantes. ONUSIDA estima que cada dos minutos, una adolescente o mujer joven de 15 a 24 años adquiere el VIH.

Asimismo, datos del año pasado indican que 800 mil niños y niñas infectados aún no recibían tratamiento para salvarles la vida. Mientras que el 60 por ciento de la población de 5 a 14 años que vive con el virus no recibe actualmente tratamiento.

Mientras más de tres cuartas partes de los adultos con VIH toman antirretrovirales, a solo poco más de la mitad de los niños se les está administrando un tratamiento.

Los mismos datos del 2021 refieren que, a pesar de que los infantes representaban el 4 por ciento de todas las personas infectadas, concentraban el 15 por ciento de todas las muertes relacionadas con el SIDA.

De acuerdo con las cifras de las Naciones Unidas, en los países que criminalizan las relaciones sexuales entre personas del mismo sexo, los hombres tienen tres veces menos probabilidades de conocer su estado de salud respecto a este tema, que aquellos que viven en naciones con las leyes menos represivas.

Respecto de los trabajadores sexuales, estas personas tienen siete veces más posibilidades de infectarse.

En todo el mundo, los hombres que mantienen relaciones sexuales con hombres tienen 28 veces más probabilidades de vivir con el VIH que la población general. Asimismo, las personas que se inyectan drogas corren 35 veces más riesgos; los trabajadores sexuales, 30 veces más, y las mujeres transgénero, 14 veces más.

De acuerdo con ONU SIDA, en 2021, 1.5 millones de personas lo contrajeron, mientras que 38.4 millones estaban viviendo con él. En dicho año, 650 mil personas murieron por enfermedades relacionadas con el SIDA.

En México, 14 mil personas han sido diagnosticadas en 2022. En total, hay más de 219 mil personas viviendo con dicha condición, de los cuales la mayoría corresponde a hombres. Así lo indica el sistema de vigilancia epidemiológica de VIH dependiente de la Secretaría de Salud (SS).

Con información de Aristegui Noticias.