Londres, Inglaterra, 23 de noviembre de 2022.

Un grupo de científicos de la Universidad de Ginebra, su homóloga de Barcelona y el University College of London descubrieron lo que podría ser el talón de Aquiles del COVID-19.

Se trata de la proteína Nsp1, una de las 16 proteínas no estructurales conocidas del virus SARS-CoV-2 causante del COVID-19.

Para estudiarla, las universidades llevaron a cabo simulaciones con algoritmos, y técnicas experimentales de evaluación y cristalografía mediante rayos X, con el fin de confirmar que futuros medicamentos podrían enfocarla.

“Esta pequeña proteína bloquea de forma selectiva nuestros ribosomas —las ‘fábricas’ de las células— haciendo que no puedan ser utilizadas, impidiendo con ello la respuesta inmunológica y estimulando al mismo tiempo la producción de proteínas virales”, explicaron científicos de la Universidad de Ginebra.

En la investigación, los expertos probaron si varias moléculas podían ligarse a la proteína objetivo y con ello servir de potencial vehículo a nuevas terapias, como parte de su estudio encontraron en particular una, el 5 acetilaminoindano, la cual se ve con mucho potencial para desarrollar nuevos tratamientos médicos.

El estudio subrayó que estos avances podrían servir también para nuevas variantes del coronavirus que amenazan con prolongar la pandemia, así como contra otros virus similares, ya que los métodos utilizados para descubrir la Nsp1 podrían hallar otras con potencial uso terapéutico.

Este descubrimiento abre la posibilidad al desarrollo de nuevos tratamientos, enfocados a ese punto débil del nuevo coronavirus y así poder terminar con la pandemia que ha dejado millones de muertos en todo el mundo.

*Con información de: N+