Una empresa de servicios domésticos de Shanghái, ha innovado la forma de publicitarse con este método.
Shanghái, 01 de septiembre 2020.-
Una empresa de servicios domésticos de Shanghái, ha innovado la forma de publicitarse cuyo método es dibujar anuncios con drones entre los espectaculares rascacielos de la ciudad. Como si fuera una película de ciencia-ficción, miles de lucecitas de colores brillan en la oscuridad de la noche formando enormes figuras; los dibujos se encienden y apagan cambiando de forma para promocionar, con caracteres en mandarín.
Esta empresa utiliza esta forma en lugar de utilizar vallas publicitarias o neones en edificios, ya que el anuncio cuelga durante varios minutos en el aire sobre las aguas del río Huangpu frente al skyline de Pudong, el distrito financiero de Shanghái del que despuntan los rascacielos más altos de la ciudad.

Este método, ha provocado que desde el Bund, el paseo en la otra orilla plagado de edificios europeos de la época colonial, miles de curiosos se arremolinan para ver la escena y, cómo no, grabarla con sus móviles.
China, es una de las industrias mundiales que liderea el uso y la construcción de drones gracias a la firma tecnológica DJI, país en el que es legal volar estos aparatos con fines comerciales, por supuesto contando siempre con los permisos oportunos y siguiendo normas básicas de seguridad.
Tanto para fines comerciales como privados, todos los drones que se utilicen en China deben estar registrados si pesan más de 250 gramos. Además de evitar zonas densamente pobladas, no pueden volar ni por encima de 120 metros ni más allá de donde alcance la vista. Junto a las zonas restringidas, como aeropuertos e instalaciones militares, está prohibido volar drones en la capital, Pekín, por albergar las principales sedes de su régimen autoritario, obsesionado con la seguridad.
Los drones comerciales, más sofisticados, de mayor tamaño y con un peso superior a los siete kilos, requieren una licencia de la Administración de Aviación Civil de China, mientras que los que superen los 116 kilos exigen una licencia de piloto.

Cabe recordar que este año, la llegada de 2020 no fue celebrada en Shanghái con sus tradicionales fuegos artificiales, sino con 2 mil drones iluminados que dibujaron en el cielo la gigantesca figura de un hombre corriendo y la cuenta atrás. Bajo los neones de sus rascacielos, que parecen sacados de “Blade Runner”, los drones traen el futuro a Shanghái.
Con información: ABC