Ciudad de México, 25 de agosto de 2020

Después de las comidas es recomendable hacer una caminata corta de 10 minutos, a fin de estimular el funcionamiento gastrointestinal ya que el movimiento corporal ayuda a la digestión, pues se estimulan los intestinos y el estómago, haciendo que los alimentos se muevan más rápido, así lo revela un estudio realizado por especialistas del Colegio Argentino de Cardioangiólogos Intervencionistas.

La investigación asegura que caminar después de comer es especialmente beneficioso para los diabéticos, ya que mejora sensiblemente el control y el manejo del azúcar en la sangre, pues previene picos excesivos de glucosa y se reduce la cantidad de insulina o medicamentos orales que se suministran.

Debido a que la salud del corazón está vinculada directamente con la actividad física, el ejercicio practicado regularmente reduce la presión arterial y el colesterol LDL, comúnmente llamado malo, y disminuye el riesgo de sufrir un ataque cardiaco o accidente cerebrovascular.

Especialistas coinciden en que es preferible repetir varias veces durante el día la práctica de ejercicios de corta duración, a realizar un solo episodio continuo de ejercicios, para reducir los triglicéridos existentes en sangre.

Los científicos recomiendan mantener paseos regulares de entre 5 y 10 minutos, cuatro veces al día y después de las comidas.

*Con información de: Infobae