Washington, Estados Unidos; 03 de mayo de 2020.-
El secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, volvió a apuntar a China como el responsable del nuevo coronavirus SARS-CoV-2, que provoca la enfermedad conocida como COVID-19.
“Hay una enorme cantidad de pruebas de que es allí donde comenzó”, aseguró a la cadena ABC, sobre el Laboratorio de Wuhan, apuntando que la nación asiática “hizo todo lo posible para asegurarse de que el mundo no se enterara a tiempo. Fue un clásico esfuerzo de desinformación comunista”, sentenció, a la par de prometer que los Estados Unidos buscarán que el gobierno de Xi Jinping se haga responsable.
Apenas hace un día se conoció un informe de 15 páginas hecho por la alianza de agencias de inteligencia “Five Eyes”, compuesto por Reino Unido, Canadá, Nueva Zelanda y Australia, mismo que asegura que asegura que Beijing ocultó información sobre esta enfermedad, de la que afirman haber encontrado pruebas de que el virus se originó en el Instituto de Virología de Wuhan. El trabajo, también afirma que mientras el régimen chino minimizaba la amenaza del virus desde diciembre, esforzándose en secreto por hacer desaparecer todo rastro de la epidemia.
Pompeo también se pronunció sobre el episodio de tensión entre las dos Coreas, cuando este sábado intercambiaron disparos, señalando que los disparos lanzados desde Corea del Norte hacia su vecino del sur fueron “accidentales”; “Un puñado de disparos llegaron (a Corea del Sur) desde el Norte, creemos que fueron accidentales. Los surcoreanos dispararon de vuelta. No hubo muertes en ningún bando”, añadió.
*Con información de: Infobae.com
