El Ejército Zapatista cumplió 26 años de su aparición en el estado de Chiapas.
Ante los megaproyectos de infraestructura que busca concretar el presidente Andrés Manuel López Obrador, en los próximos años, el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) advirtió que defenderá a la Madre Tierra en el sureste de México.
Durante la medianoche del 31 de diciembre y los primeros minutos del 1 de enero, el Ejército Zapatista cumplió 26 años de su aparición en el estado de Chiapas, motivo por el que el subcomandante Marcos Moisés hizo un llamado a sus bases para defender su tierra “hasta morir si es preciso”.
Desde que hicieron públicas las construcciones del Tren Maya, que pasará por los estados de Quintana Roo, Campeche, Yucatán, Tabasco y Chiapas, y el Corredor Transístmico, que unirá los océanos Pacífico y Atlántico, el EZLN mostró su rechazo a las obras.
Mediante una carta, Moisés llamó al Congreso Nacional Indígena (CNI), colectivos, organizaciones de la sexta internacional y redes de resistencia y rebeldía a la movilización, “cada quien en su geografía, calendario y modos”.
Recordó que el 1 de diciembre de 2018, “el capataz (López Obrador) que ahora manda en el lugar que se llama México, hizo una simulación de que pidió permiso a la Madre Tierra para destruirla, así cree que la Madre Tierra le da permiso para matarla y hacer un tren que debería llamarse como su familia del capataz”.
Dijo que el sistema capitalista es “una bestia que o tiene llenadero” y no le importa destruir la naturaleza, pueblos enteros, culturas, milenarias, civilizaciones completas, incluso el planeta entero y busca otros nombres para esconderse y atacar.
Además, el dirigente zapatista criticó al Gobierno federal y lo acuso de que hace unas semanas hizo otra simulación de una supuesta consulta, sobre la construcción del Tren Maya, donde “solo informó que hay muchas cosas buenas de los megaproyectos, pero o dijo nada de todas las desgracias que trae para la gente y la naturaleza”.
El EZLN hizo pública su presencia el 1 de enero de 1994 al tomar por las armas varios poblados del estado suroriental de Chiapas en el inicio de un conflicto que se alargó 10 días hasta que el gobierno mexicano declaró un alto al fuego unilateral.
Posteriormente, el Gobierno y el EZLN sostuvieron un diálogo en la Catedral de San Cristóbal de las Casas y pusieron en marcha un proceso de paz que concluyó con los acuerdos de San Andrés en 1996, cuyo incumplimiento llevó a la ruptura del diálogo.
Desde entonces, el EZLN ha mantenido su presencia en varias zonas del estado de Chiapas y ha rechazado contactos de diálogo con los gobiernos de los presidentes Vicente Fox, Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto y ahora muestra sy desacuerdo con las políticas de López Obrador.
Con información de: Noticieros Televisa